La Plataforma en Defensa de Madrid Central apoya las reivindicaciones de los trabajadores y trabajadoras de la EMT
Con motivo de la celebración en Madrid de la COP25, la Plataforma en Defensa de Madrid Central denuncia los discursos plagados de demagogia ambiental del Ayuntamiento de la capital, mientras lleva a cabo unas políticas de movilidad que reman en sentido contrario a los planteamientos de la cumbre del Clima.
Por ello, desde la Pataforma consideran que un transporte público sostenible y de calidad es una pieza clave para mejorar la calidad del aire.
La Plataforma en Defensa de Madrid Central, formada por más de 100 organizaciones de la sociedad civil madrileña, que a su vez aglutinan a un número superior al millar de entidades, quiere recordar que el Gobierno municipal sigue defendiendo su intención de revertir Madrid Central, la zona de bajas emisiones que restringe el tráfico de vehículos para combatir la contaminación. Frenado su primer intento por varios juzgados al considerar que atentaba contra la salud de la población, saca un nuevo plan improvisado, que permitirá la entrada de más tráfico en M.C. además de otras actuaciones en el resto de la ciudad encaminadas a desmantelar pequeñas zonas peatonales (c/ Galileo) y carriles-bici ya existentes, o retirar semáforos para favorecer una mayor velocidad y fluidez a los automóviles.
El nuevo plan anticontaminación (llamado Madrid 360) contiene medidas de ampliación de viario, como el túnel de la A-5, subvenciones a la compra de coches y construcción de nuevos aparcamientos, todo ello en nombre de la «libertad de circulación». Además, carece de simulaciones científicas sobre cómo esas medidas van a reducir la contaminación de la ciudad. No es de extrañar que el nuevo plan se haya diseñado sin contar con los organismos existentes con anterioridad sobre calidad del aire, como la Comisión Técnica del Plan A y la Comisión de seguimiento de Madrid Central, bloqueando el acceso a la información sobre evolución del tráfico, multas, etc. a las citadas comisiones que tienen representación de la ciudadanía. Es decir, el Ayuntamiento hace gala de un estilo de gobierno antidemocrático que impide la participación ciudadana a la vez que promueve el uso del coche en la ciudad, mientras habla de «sostenibilidad ambiental».
Estas medidas se complementan con un ataque frontal del nuevo equipo de gobierno contra una de las piedras angulares del transporte público del municipio, la Empresa Municipal de Transporte (EMT), que recibieron bien gestionada y saneada. La situación que ha llevado a sus trabajadores/as a la huelga se debe a un empeoramiento del servicio, que ha perdido frecuencias, dejando en cocheras parte de sus autobuses, al negarse el gobierno municipal a realizar las nuevas contrataciones prevista. A ello se suma la intención de privatizar de nuevo Teleférico y Bicimad, rescatados por la EMT de una pésima gestión privada y convertido este último en un servicio eficiente y en expansión.
La Plataforma en Defensa de Madrid Central considera que un transporte público bien gestionado y al servicio de las necesidades ciudadanas, que permita dejar el coche y moverse en bus o metro, es una pieza clave para reducir las emisiones de CO2 y caminar hacia una ciudad más saludable. Por estos motivos, apoya la huelga de los trabajadores/as de la EMT y convoca a la ciudadanía y a todos los colectivos sociales a participar en la manifestación que tendrá lugar el martes 3 de diciembre a las 17,30h desde el Consorcio de Transporte – CRT – (Santa Engracia, metro Río Rosas) a la plaza de Cibeles.